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17,01 €Una sonrisa, por favor. No te pongas tan seria pedÃa el fotógrafo a la pequeña Jane cuando la chiquilla tenÃa seis años y tuvo que posar para una foto de familia. Esto sucedÃa en 1896 en la Dominica, lugar de nacimiento de Jane Rhys. De ahà arrancan los recuerdos de la autora, que habla de su infancia en la isla para luego relatar su vida en Londres y ParÃs, las dos ciudades donde vivió a partir de los años veinte del siglo pasado y donde tuvo que sobrevivir trabajando como chica del coro en cabarets, haciendo de extra en las primeras pelÃculas que se rodaban en Inglaterra y deambulando de una pensión a otra, en busca de un afecto que a menudo se trocaba en indiferencia. A su lado, siempre habÃa unos cuadernos de notas de tapas negras donde la mujer iba apuntando sus vivencias, la desolación al verse abandonada por su primer amor y esa sensación de "extranjerÃa del alma" que le impidió actuar de modo contundente en los asuntos de su vida.
De esos apuntes nacerÃan, en los años 20 y 30, las cuatro novelas que la autora ambientó en Europa, pero quien nos habla ahora en estas páginas autobiográficas es una mujer de más de ochenta años, que mira con cierto desapego su vida pasada y se declara perdedora sin caer nunca en la autocompasión. Dura, lúcida y a menudo irónica, esta pequeña obra maestra es una introducción ideal al mundo de una de las autoras más notables del siglo XX.
"Me gusta dar forma al mundo y asà lo hago en mis novelas. Lástima que la vida no tenga forma alguna."
Jean Rhys