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22,71 €Existen pocas biografÃas de los jesuitas "antiguos" que operaron en tierras del Perú. Este libro trata sobre la vida de uno de ellos: el padre extremeño Diego MartÃnez (1542-1626). MurÃo el 7 de abril de 1626, en el Colegio Máximo de San Pablo, y lo hizo en olor de santidad cuando contaba 84 años de edad y 61 de servicio en la CompañÃa de Jesús. A diferencia de la "verdad hagiográfica", esta biografÃa sitúa al padre MartÃnez en el tiempo histórico que le tocó vivir. Fue uno de los misioneros jesuitas más reputados y venerados que operaron en el Cuzco (1573-76), Juli (1576-86), Santa Cruz de la Sierra (1587-1600), Charcas (1600-1606), Cuzco (1606-1610) y Lima (1611-1626).La primera hagiografÃa del padre MartÃnez, escrita por el padre Juan MarÃa FreylÃn en 1629, sirvió como un medio de socialización, aprendizaje, formación de hábitos y valores para el programa misional que la CompañÃa querÃa impulsar en el Perú. Lo que "habÃa sucedido" ("verdad histórica") no era tan importante como situar al personaje en un espacio y tiempo sagrados ("verdad hagiográfica" o "retórica"). A principios de 1630, la CompañÃa de Jesús habÃa puesto en marcha unas polÃticas de santidad con el fin de promover a sus miembros más destacados a la beatificación y reunir a los fieles en torno a un personaje legendario. Con la promoción del padre MartÃnez a los altares, los jesuitas pretendÃan coronarse como misioneros ejemplares; los mismos que por entonces deseaban encontrar el espejo de Dios en las vidas de sus santos cofrades.